Speaker 1: En Alemania crece la preocupación por las declaraciones del multimillonario Elon Musk cuando el país se encuentra en plena campaña para las elecciones de febrero. Musk ha apoyado públicamente al partido ultraderechista Alternativa para Alemania y ha pedido al canciller Olaf Scholz que dimita. El jueves Musk mantuvo en su red social X una entrevista con Alice Weidel, la candidata de Alternativa para Alemania a la cancillería. En las últimas semanas Musk ha insultado a través de la red social X a varias personalidades de la política alemana. El gobierno lo ha acusado de utilizar su plataforma para influir en las elecciones.

Speaker 2: Más de 200.000 personas siguieron en vivo la conversación y hoy las reacciones no se han hecho esperar, especialmente por parte de los fact-checkers o verificadores de datos. Y es que la ultraderecha de Alternativa para Alemania, la que representa Weidel, cuenta con una buena lista de bulos difundidos y ayer no fue diferente. No se han encontrado mentiras o faltas a la verdad en afirmaciones de Weidel sobre política energética, carga fiscal o educación. En este último punto, Weidel afirmó anoche que los estudiantes alemanes no aprenden nada más que sobre políticas de género y eso aunque no existan asignaturas sobre el tema en ningún curso de la enseñanza primaria y secundaria y solo pueda encontrarse algo similar en estudios universitarios específicos. También la Unión Europea ha denunciado falsedades. Weidel aseguró que 150 burócratas de la Unión estaban obligados a seguir su conversación con Musk. Desde Bruselas han aclarado que como mucho dos o tres personas en las instituciones europeas siguieron la charla por motivos relacionados con sus funciones. Pero por encima de todos los bulos, este viernes se comentaba en Alemania la afirmación de Weidel sobre Hitler, del que dijo que era comunista, repitiendo un argumento que se usa a menudo en la extrema derecha, una teoría ampliamente negada por los historiadores. Pero Weidel quería ayer claramente alejarse de la imagen de la candidata ultraderechista, calificó a su partido como conservador libertario, incluyéndose en la esfera de Milley o el propio Musk. El gobierno no ha entrado en comentarios sobre el contenido. Ha hablado de un acto de campaña. No será el último. Parece que el periódico Welt está organizando un evento para enero en el que Weidel y Musk se verán las caras de nuevo sin importarles las acusaciones de injerencia y de infracciones a la ley electoral.